Periodistas en Venezuela, Denunciaron Atropellos En El Marco De La XII Feria Internacional del Libro

Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela.

Al abordar lo discutido durante las jornadas de Comunicación Lengua y Pensamiento, que se desarrollo en la ciudad de Valencia,Venezuela, en Noviembre del ano 2011,  en el marco de la Feria Internacional del Libro, Filuc,  basados en los principios señalados en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, aprobada por la Asamblea Nacional de esta nación el Veinte de Diciembre de Mil Novecientos Noventa y Nueve, y que reza en el Artículo 57, lo siguiente ¨Toda persona tiene derecho a ex emitir  libremente sus pensamientos, sus ideas u opiniones de viva voz, por escrito o mediante cualquier otra forma de expresión, y de hacer uso para ello de cualquier medio de comunicación y difusión sin que pueda establecerse censura. Quien haga uso de este derecho asume plena responsabilidad por todo lo expresado. No se permite el anonimato, ni la propaganda de guerra, ni los mensajes discriminatorios, ni los que promuevan la intolerancia religiosa.¨ Fin del Artículo. Al iniciarse el debate los primeros en emitir sus opiniones en estas jornadas, en relación a la libertad de expresión que se ejerce en Venezuela, fueron la periodista Charito Rojas, y su colega Francisco Miguel Pérez. Rojas, dijo, en este país no es fácil decir la verdad, porque se corre el peligro de una persecución permanente y peligrosa, pero a pesar de ello ¨no la detendrán en sus constantes denuncias por expresar la realidad sobre cualquier hecho que ocurra y que atente, contra el patrimonio del pueblo venezolano u otro caso que sea de interés público¨.  Por otro lado el periodista Francisco Miguel Pérez, quien  viene ejerciendo la comunicación desde hace cuarenta años, y es columnista del Diario El Carabobeño, medio de posición independiente,  hizo un recuento del proceso penal que se le siguió, al defender el Código de Ética del Periodista de mantener en secreto  la fuente, lo cual condujo a la persona señalada acusarlo de calumnia,  censurada la columna por él desarrollada, aunque la misma goza de un gran numero sus lectores que la califican de  ser una fuente confiable,  siendo su primera edición  publicada hace mas de veinte años,  y  ahora se presento este bochorno e incalificable atropello, que en definitiva, Pérez luego de un largo proceso judicial, obtuvo la razón en los tribunales que ventilaron la demanda.